Introducción
Las tensiones entre Estados Unidos e Irán han escalado recientemente tras los ataques ordenados por el expresidente Donald Trump a instalaciones nucleares iraníes. Sin embargo, expertos en seguridad internacional advierten que estas acciones no solo han fracasado en destruir el camino de Irán hacia la obtención de armas nucleares, sino que podrían también arrastrar a Estados Unidos a un conflicto prolongado y costoso.

Impacto en el programa nuclear de Irán
Según analistas, los ataques no lograron desmantelar el stock de uranio enriquecido que Irán ha acumulado a lo largo de los años, estimado en alrededor de 400 kilogramos, suficiente para producir aproximadamente diez armas nucleares. El Dr. Jeffrey Lewis, director del Programa de No Proliferación de Asia Oriental en el Instituto Middlebury, indica que aunque la capacidad técnica de Irán podría haber sufrido un leve retroceso, la voluntad política para continuar su programa nuclear ha aumentado considerablemente tras los ataques [1].

Efectividad de los ataques
Trump calificó las operaciones como un “éxito militar espectacular”, afirmando que las instalaciones de Fordow, Natanz y Esfahan habían sido "completamente y totalmente destruidas". Sin embargo, los expertos consideran que la efectividad de estos ataques es cuestionable, ya que Irán tuvo tiempo para evacuar y proteger su infraestructura nuclear antes de los bombardeos. Esto sugiere que las acciones militares de Estados Unidos podrían no haber sido tan decisivas como se proclamó [2].

Consecuencias para la política exterior de EE. UU.
Las acciones de Trump han generado un debate considerable sobre la política exterior de Estados Unidos y su enfoque hacia Irán. Algunos analistas advierten que este tipo de intervenciones pueden tener repercusiones a largo plazo en la estabilidad de la región y en las relaciones internacionales, especialmente en Europa, que ha estado buscando un enfoque más diplomático en lugar de militar.
Riesgos de un conflicto prolongado
El aumento de las hostilidades podría llevar a un atolladero militar para EE. UU., similar a otros conflictos en los que se ha involucrado sin un claro objetivo de salida. Los expertos sugieren que, en lugar de frenar el programa nuclear iraní, estas acciones pueden haber fortalecido la determinación de Teherán de continuar su búsqueda de armas nucleares, lo que plantea un desafío importante para la seguridad global [3].
Conclusiones
En resumen, los ataques de Trump a las instalaciones nucleares de Irán no han logrado desmantelar su capacidad de enriquecimiento de uranio y, en cambio, han podido incrementar la voluntad política de Irán de avanzar hacia la obtención de armamento nuclear. Este desarrollo no solo plantea riesgos significativos para la seguridad de Estados Unidos, sino también para la estabilidad de Europa, que podría verse atrapada en las consecuencias de un conflicto prolongado. La comunidad internacional deberá prestar atención a estos acontecimientos y considerar enfoques alternativos más efectivos para abordar las ambiciones nucleares de Irán.
Fuentes
- [1] Qui est Massad Boulos, ce libanais conseiller de TRUMP
- [2] Pourquoi ce chapeau de Melania Trump
- [3] USA: US-Psychiater und Psychologen warnen vor Trump
Sobre la autora
El autor de este artículo es Martina Torres, una reportera sénior de noticias internacionales para ElPulsoGlobal especializada en asuntos globales y política internacional.