Illinois considera poner fin a un programa de salud para algunos inmigrantes que viven ilegalmente en EE. UU.

El estado de Illinois se encuentra en una encrucijada económica, lo que ha llevado al gobernador JB Pritzker a considerar la eliminación de un programa de salud destinado a inmigrantes indocumentados. A medida que el estado enfrenta un déficit presupuestario para el próximo año fiscal, se hace evidente la difícil realidad de equilibrar las necesidades de salud pública con las restricciones financieras.

El programa de salud en Illinois

Desde su implementación, Illinois se ha posicionado como un estado santuario, ofreciendo cobertura de salud a ciertos grupos de inmigrantes. En 2020, el estado lanzó el programa de Beneficios de Salud para Adultos Mayores Inmigrantes, que cubre a personas de 65 años o más, y en 2021 introdujo el programa Beneficios de Salud para Adultos Inmigrantes, destinado a individuos de 42 a 64 años. Sin embargo, actualmente se ha detenido la inscripción en ambos programas, y se prevé que la cobertura para los adultos menores de 65 años finalice el 30 de junio de este año [1][2].

El costo estimado de estos programas asciende a unos 404 millones de dólares este año, lo que ha llevado a la administración de Pritzker a cuestionar su viabilidad en el contexto de un presupuesto de 55.2 mil millones de dólares [3]. La decisión de continuar o no con estos programas podría afectar a decenas de miles de migrantes que dependen de estos servicios para acceder a atención médica básica.

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Situación en otros estados

Illinois no es el único estado enfrentando desafíos similares. California, Minnesota, Oregón y el Distrito de Columbia también ofrecen seguros de salud públicos a adultos independientemente de su estatus migratorio. Sin embargo, California ha anunciado recientemente una congelación de inscripciones en su programa de salud para inmigrantes, debido a un aumento en los costos que superan las previsiones iniciales [4][5]. Esta tendencia podría reflejar un cambio más amplio en la política de salud pública en los EE. UU., donde los programas de salud para inmigrantes se están convirtiendo en un objetivo de recortes presupuestarios.

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Impacto en la comunidad inmigrante

El impacto de la posible eliminación de estos programas en Illinois podría ser devastador para la comunidad inmigrante. Representantes como Barbara Hernández han destacado la importancia de estos servicios, afirmando que “hay una gran necesidad en la comunidad indocumentada que no puede obtener atención médica de otra manera” [2]. Sin la cobertura adecuada, muchas familias se enfrentarían a la imposibilidad de acceder a atención médica esencial, lo que podría tener consecuencias graves en su bienestar.

Conclusión

La situación en Illinois es un claro ejemplo de las tensiones entre las políticas de inmigración y las realidades económicas. La posible eliminación de la cobertura de salud para inmigrantes subraya la necesidad de encontrar un equilibrio entre la responsabilidad fiscal del estado y la atención a las necesidades de una población vulnerable. A medida que otros estados también enfrentan presiones similares, es fundamental que se lleve a cabo un diálogo constructivo sobre la salud pública y la inmigración en los EE. UU.

Fuentes

[1] Illinois Mulls Ending a Health Program for Some Immigrants Living in ...
[2] Illinois on track to end health coverage program for immigrant adults
[3] What Pritzker's Health Cuts Mean for Undocumented Immigrants
[4] McLean County immigrants fear dire consequences as Illinois ends ...
[5] Healthcare for noncitizens in Illinois is on the chopping block

Acerca de la autora

El artículo ha sido escrito por Martina Torres, una reportera sénior de noticias internacionales para ElPulsoGlobal, especializada en asuntos globales y política internacional.

Illinois considera poner fin a un programa de salud para algunos inmigrantes que viven ilegalmente en EE. UU.