El rey Carlos advertirá que 'Canadá no está en venta' durante su visita a Ottawa tras las amenazas de Trump
Durante su próxima visita a Ottawa, el rey Carlos III de Reino Unido tiene previsto dejar claro que “Canadá no está en venta”. Esta declaración llega en un momento en que las tensiones diplomáticas se han intensificado, especialmente tras las sugerencias del expresidente estadounidense Donald Trump de que Canadá podría convertirse en el 51º estado de EE. UU.

Contexto de la visita
El comisionado de Canadá en el Reino Unido, Ralph Goodale, ha enfatizado que la visita del monarca servirá para “reforzar el poder y la fortaleza del mensaje” sobre la soberanía canadiense. Esta advertencia se produce justo cuando el nuevo primer ministro canadiense, Mark Carney, ha mostrado su oposición a las insinuaciones de Trump, subrayando que “Canadá no está en venta ahora, ni estará en venta jamás” [1].
El rey Carlos abrirá una sesión del Parlamento canadiense, un acto que no se realizaba desde 1977, lo que resalta la importancia de su visita. Goodale ha mencionado que esta es una “oportunidad muy importante” para que el rey hable directamente a los canadienses sobre la relevancia de su soberanía en el contexto actual [2].

Impacto en la relación entre Canadá y EE. UU.
La visita también se produce en un entorno internacional complicado, donde la relación entre Canadá y EE. UU. se encuentra bajo la presión de crisis globales, como los conflictos en Ucrania y Gaza, así como disputas comerciales. A pesar de estos desafíos, el enfoque de Canadá bajo la administración de Carney parece ser mantener una postura firme en defensa de su soberanía, a la vez que intenta gestionar relaciones constructivas con su vecino del sur [3].
El primer ministro Carney ya ha expresado su descontento con la invitación extendida a Trump para una visita de estado, indicando que esta acción podría interferir con los mensajes que su gobierno intenta enviar en respuesta a las amenazas a la soberanía canadiense [4].

Reacciones y percepciones en Canadá
Las declaraciones de Carney han sido respaldadas por Goodale, quien describe las palabras del primer ministro como “directas” y “muy precisas”. La percepción en Canadá es clara: los ciudadanos no están impresionados por gestos que puedan interpretarse como debilitantes para la soberanía canadiense, especialmente en el contexto de las amenazas de Trump [5].
Conclusión
La próxima visita del rey Carlos III a Ottawa promete ser un evento significativo no solo para Canadá, sino también para la relación entre este país y los Estados Unidos. Con un énfasis en la soberanía y la independencia, el monarca podría ofrecer un mensaje crucial en un momento de incertidumbre política. A medida que los líderes canadienses buscan reafirmar su autonomía, la visita del rey podría ser un paso importante en la reafirmación de la identidad nacional canadiense frente a presiones externas.
Fuentes
- [1] King Charles to warn 'Canada is not for sale' during Ottawa trip after ...
- [2] 'King's Ottawa visit will send clear message to Trump that Canada is ...
- [3] King's visit to 'reinforce' Canadian sovereignty against Trump, says ...
- [4] King Charles's trip to Ottawa will tell US 'Canada is not for sale'
- [5] Analysis: How King Charles is sending Canada subtle signals of support ...
Sobre la autora
El artículo ha sido escrito por Martina Torres, una reportera sénior de noticias internacionales para ElPulsoGlobal, especializada en asuntos globales y política internacional.