Atentado suicida en iglesia de Damasco deja 20 muertos, informan las autoridades
Un atentado suicida en la iglesia de Mar Elias en Dweila, en las afueras de Damasco, ha dejado al menos 20 muertos y 52 heridos, según ha informado el Ministerio de Salud de Siria. Este ataque se produce en un contexto de creciente violencia sectaria en el país, lo que plantea serias preocupaciones sobre la seguridad y la estabilidad en la región.
Detalles del ataque
El atacante ingresó a la iglesia durante un servicio religioso, abriendo fuego antes de detonar un chaleco explosivo. Según el Ministerio del Interior, el autor del ataque estaba vinculado al grupo yihadista Estado Islámico (EI), aunque hasta el momento no ha habido una reivindicación oficial del grupo sobre el atentado [2][3].
Los equipos de defensa civil sirios, conocidos como los Cascos Blancos, han difundido imágenes y videos del interior de la iglesia, donde se observa un altar gravemente dañado, bancos cubiertos de cristales rotos y un suelo ensangrentado. Testigos en el lugar han descrito momentos de pánico, indicando que el atacante comenzó a disparar antes de hacer explotar el dispositivo explosivo [5][7].
Reacciones y consecuencias
Las fuerzas de seguridad han acordonado la zona y están llevando a cabo una investigación sobre el ataque. Este es el primer atentado de este tipo en Damasco desde que Bashar al-Assad fue derrocado por fuerzas rebeldes en diciembre pasado [3][4]. Además, el presidente interino Ahmed al-Sharaa, cuyo grupo islamista sunita, Hayat Tahrir al-Sham (HTS), es un antiguo afiliado de Al-Qaeda, ha prometido proteger a las minorías religiosas y étnicas en el país.
No obstante, Siria ha sido escenario de dos olas recientes de violencia sectaria, lo que pone de relieve los desafíos que enfrenta el nuevo gobierno y la fragilidad de la paz en el país [1][6].
Conclusión
El atentado en Damasco subraya la continua amenaza del extremismo en la región y la necesidad urgente de medidas efectivas para garantizar la seguridad de las comunidades religiosas y étnicas. Este tipo de violencia no solo afecta a Siria, sino que también tiene repercusiones en la estabilidad de Europa, donde la preocupación por el terrorismo y la radicalización sigue siendo alta. A medida que se desarrollan los acontecimientos, es crucial que las autoridades tomen acciones decisivas para prevenir futuros ataques y proteger a los ciudadanos.
Fuentes
Sobre la autora
El autor de este artículo es Martina Torres, una reportera sénior de noticias internacionales para ElPulsoGlobal especializada en asuntos globales y política internacional.
