Introducción
Truett-McConnell University (TMU), una institución educativa en Cleveland, Georgia, se encuentra en el ojo del huracán tras las recientes denuncias de abuso sexual y acoso que han salido a la luz. Las acusaciones han generado una ola de protestas y llamados a la responsabilidad de los directivos de la universidad, señalando una cultura de encubrimiento que, según los críticos, ha permitido que los abusos continúen sin consecuencias [1][2].

Investigación y Reacciones
El Consejo de Administración de TMU ha respondido a la presión pública lanzando una investigación independiente y colocando al presidente de la universidad, Emir Caner, en licencia administrativa mientras se lleva a cabo la investigación [3]. Esta decisión se produjo después de que un grupo de exalumnos y simpatizantes se reunieran en una protesta pacífica, exigiendo transparencia y justicia para las víctimas [4].

Acusaciones y Testimonios
Las denuncias se centran principalmente en Bradley Reynolds, ex vicepresidente de asuntos académicos de TMU, quien ha sido acusado de abuso psicológico y sexual por parte de Hayle Swinson, una exalumna y empleada de la universidad. Swinson alega que líderes universitarios, incluido Caner, protegieron a Reynolds y silenciaron a los críticos [5]. Reynolds renunció tras una investigación del Sheriff del Condado de White en febrero-marzo de 2024 [6].
Varios manifestantes han corroborado las acusaciones de Swinson, describiendo una cultura de encubrimiento dentro de la universidad. Una exmiembro del personal, que pidió no ser identificada, mencionó que los estudiantes varones acusados de acoso eran suspendidos por un semestre, pero a menudo se les permitía regresar [7]. En 2019, una petición firmada por 50 estudiantes mujeres que denunciaban la mala conducta de Reynolds fue presuntamente ignorada [8].

Cultura del Silencio
El clima de secretismo se ve reflejado en un correo electrónico enviado por Maël Disseau, Decano del Colegio de Artes y Letras de TMU, en el que aconsejaba al personal no compartir detalles sobre la repentina renuncia de Reynolds. Disseau argumentó que buscar detalles solo satisface la curiosidad y que la verdadera obediencia debe ser hacia Dios [3].
Conclusión
Las protestas y las exigencias de responsabilidad en TMU destacan la creciente intolerancia social hacia las instituciones que fallan en abordar adecuadamente las denuncias de abuso. La situación en TMU no solo subraya la importancia de la transparencia y la rendición de cuentas, sino que también pone de manifiesto la necesidad de un cambio cultural dentro de las instituciones educativas para proteger a las víctimas y prevenir futuros abusos.
Fuentes
- [1] TMU under fire over abuse claims
- [2] Abuse allegations at TMU ignite outcry
- [3] TMU President Accused of Ignoring Years-long Sex
- [4] TMU details reasons former school officials were fired
- [5] Protests, Petitions Roil TMU
- [6] White County News, Cleveland, GA
- [7] TMU Trustees Approve Steps
- [8] TMU issues statement amid allegations
Sobre la autora
Martina Torres es una reportera sénior de noticias internacionales para ElPulsoGlobal, especializada en asuntos globales y política internacional. Con una extensa carrera en el periodismo, Torres se dedica a cubrir temas complejos con un enfoque en la imparcialidad y la precisión informativa.