Regreso a Nueva Orleans de los cráneos de 19 afroamericanos tras 150 años para un servicio conmemorativo
Más de 150 años después de que sus cabezas fueran seccionadas y enviadas a Alemania para “investigación”, los cráneos de 19 afroamericanos, que recientemente fueron devueltos, serán conmemorados en una ceremonia sagrada en Nueva Orleans. Este evento busca confrontar un oscuro capítulo de la historia médica y científica, eligiendo un camino de justicia, honor y recuerdo.

Contexto histórico
Los individuos que serán homenajeados fallecieron en el Hospital Charity de la ciudad en 1872. Sus cabezas fueron cortadas y enviadas a la Universidad de Leipzig en Alemania para ser estudiadas. Esta práctica, común en esa época, tenía como objetivo confirmar teorías infundadas que sostenían que los cerebros de las personas afrodescendientes eran más pequeños que los de otras razas, lo que implicaba su supuesta inferioridad. Según Monique Guillory, presidenta de la Universidad Dillard, “fueron despojados de su dignidad” en un proceso que estaba arraigado en el racismo y la explotación [1].

El proceso de repatriación
Los cráneos regresaron a Nueva Orleans hace aproximadamente una semana tras un viaje de dos años. Eva Baham, profesora jubilada de Dillard, informó que representantes de Leipzig contactaron a la ciudad en 2023 sobre la existencia de estos restos en Alemania, donde la universidad alberga una colección de cráneos que data del siglo XIX. Este llamado inicial motivó la creación del Comité de Repatriación Cultural, liderado por Baham [2].
“No estamos hablando de ellos como si fueran restos esqueléticos”, enfatizó Baham en una conferencia de prensa. “Queremos honrarlos llamándolos por sus nombres” [3]. La Universidad Dillard, una institución históricamente afroamericana, acoge la oportunidad de formar parte de este reconocimiento sensible hacia su comunidad.
Detalles del homenaje
El servicio conmemorativo se llevará a cabo el sábado en la Capilla Memorial Lawless de Dillard, donde se rendirá homenaje a los restos de personas como Adam Grant, Isaak Bell, Hiram Smith, y otros. La ceremonia no solo busca recordar a estos individuos, sino también reconocer el impacto negativo de la pseudociencia racista que los deshumanizó en vida [4].
La conmemoración será un evento público significativo, y se espera que el homenaje incluya un funeral al estilo jazzero, reflejando la rica cultura de Nueva Orleans [5]. Sin embargo, el comité ha intentado sin éxito durante dos años contactar a los descendientes de las víctimas, aunque lograron obtener información sobre sus nombres y causas de muerte a partir de registros municipales.
Conclusión
El regreso de los cráneos a Nueva Orleans representa un paso importante hacia la reconciliación y el reconocimiento de los errores del pasado. Este acto de memoria no solo honra a los individuos involucrados, sino que también invita a una reflexión más profunda sobre la historia del racismo y la explotación en la ciencia. En un contexto europeo, donde las discusiones sobre la repatriación de artefactos culturales y humanos están en aumento, este caso en particular resuena con una necesidad urgente de justicia histórica y reparación.
Fuentes
Sobre la autora
Martina Torres es una reportera sénior de noticias internacionales para ElPulsoGlobal, especializada en asuntos globales y política internacional.