Policías absueltos tras usar gas pimienta y pistola eléctrica contra un hombre de 92 años en un hogar de cuidado
En un caso que ha suscitado un intenso debate sobre el uso de la fuerza por parte de las fuerzas del orden, dos policías británicos han sido absueltos de agresión tras utilizar gas pimienta y una pistola eléctrica contra Donald Burgess, un hombre de 92 años y amputado de una pierna, en un hogar de cuidado en Sussex. Este incidente ocurrió el 21 de junio de 2022, cuando los oficiales fueron llamados a la residencia tras un altercado que involucró una amenaza con un cuchillo.
Detalles del incidente
Los oficiales, PC Stephen Smith de 51 años y PC Rachel Comotto de 36 años, enfrentaron cargos de agresión, pero un jurado del Tribunal de Southwark en Londres los declaró no culpables. Durante el juicio, se presentó evidencia de que los oficiales habían sido llamados después de que Burgess amenazara a los empleados con un cuchillo que le había sido proporcionado para cortar su comida. En menos de dos minutos tras entrar en su habitación, Smith utilizó spray de Pava, similar al gas pimienta, en la cara del anciano y trató de desarmarlo con un bastón, mientras Comotto desplegaba su Taser [1][2].
Reacción y testimonios en el tribunal
El tribunal escuchó testimonios sobre la situación tensa y amenazante que los empleados del hogar de cuidado habían estado soportando durante más de 30 minutos antes de llamar a los servicios de emergencia. El gerente del hogar, Steve Cooper, describió a Burgess como "muy agresivo y amenazante" y afirmó que no era el mismo hombre que conocía [3].
En defensa de sus acciones, Smith declaró que no se dio cuenta de que Burgess era una persona discapacitada hasta después del incidente, mientras que Comotto argumentó que su decisión de usar el Taser era la forma más segura de proteger al anciano, temiendo que el uso del bastón pudiera causar más daño [4].
Implicaciones y reflexiones
Este caso refleja las preocupaciones crecientes en torno al uso de la fuerza por parte de las fuerzas de seguridad, especialmente en situaciones que involucran a personas vulnerables. En el contexto europeo, donde se están revisando constantemente las políticas de uso de la fuerza, este incidente podría tener repercusiones en las normativas y procedimientos de intervención de la policía, así como en la percepción pública de la seguridad y la protección de los ciudadanos ancianos y discapacitados.
La decisión del jurado ha generado críticas y cuestionamientos sobre si se hizo un uso excesivo de la fuerza en este caso particular. A medida que las sociedades europeas abordan la cuestión de la violencia policial, este tipo de incidentes podrían influir en futuras reformas legislativas y en la formación de los agentes de policía para manejar situaciones similares con mayor sensibilidad y cuidado.
Conclusión
La absolución de los oficiales en este caso plantea cuestiones importantes sobre la ética y la práctica policial en el manejo de situaciones que involucran a personas vulnerables. A medida que los debates sobre la violencia policial continúan, será fundamental que las autoridades revisen sus protocolos para garantizar que se priorice la seguridad y el bienestar de todos los ciudadanos, independientemente de su condición física o edad.
Fuentes
Sobre la autora
Martina Torres es una reportera sénior de noticias internacionales para ElPulsoGlobal, especializada en asuntos globales y política internacional.
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