Introducción
Un reciente incidente en Alaska ha captado la atención internacional, ilustrando tanto los peligros de la naturaleza como la importancia de la rápida respuesta en situaciones de emergencia. Kell Morris, un hombre de 61 años, sobrevivió tras quedar atrapado boca abajo en un arroyo por una roca de 700 libras (318 kg) durante tres horas, gracias en gran parte a la rápida acción de su esposa y la intervención de los servicios de emergencia. Este suceso no solo resalta la valentía humana, sino que también plantea preguntas sobre la seguridad en actividades al aire libre, que son populares entre los europeos y españoles, especialmente durante el verano.

El incidente
El accidente ocurrió mientras Kell y su esposa, Jo Roop, realizaban una caminata en un sendero aislado cerca del glaciar Godwin, al sur de Anchorage. La pareja optó por evitar las multitudes del fin de semana y se aventuró en un área menos transitada, donde se encontraron con un lecho de arroyo rocoso. La situación se tornó crítica cuando una roca masiva se desprendió y cayó sobre Morris, atrapándolo y dejándolo en una posición vulnerable en el agua helada.

La intervención de la esposa
Jo, quien es una ex oficial de la policía estatal de Alaska, demostró una notable presencia de ánimo al sostener la cabeza de su esposo sobre el agua para evitar que se ahogara mientras esperaban la llegada de los rescatistas. Tras 30 minutos de intentos por liberar a su esposo, decidió buscar ayuda, caminando aproximadamente 274 metros para obtener señal de teléfono y contactar a los servicios de emergencia, enviando coordenadas GPS precisas para facilitar el rescate.

Rescate y conclusión
El rescate, facilitado por un servicio de turismo con perros de trineo que escuchó el despacho de emergencia, permitió que un helicóptero transportara a los rescatistas a la escena. Una vez allí, un equipo de siete hombres utilizó bolsas de aire para levantar la roca y liberar a Morris, quien estaba a punto de perder el conocimiento debido a la presión y el dolor. A pesar de la gravedad de la situación, Morris salió del incidente con solo lesiones menores, lo que él mismo describió como una experiencia de suerte extraordinaria.
Este acontecimiento pone de relieve la importancia de la preparación y la respuesta adecuada en situaciones de emergencia, especialmente en actividades al aire libre que son populares en regiones montañosas y heladas, como los Pirineos y los Alpes en Europa. La historia de Kell Morris y Jo Roop es un recordatorio de que, a pesar de los riesgos, la valentía y la rapidez en la acción pueden salvar vidas.
Fuentes
- CNN [1]
- Fox News [2]
- NBC Bay Area [3]
- CBC [4]
- Independent [5]
Sobre la autora
El autor de este artículo es Martina Torres, una reportera sénior de noticias internacionales para ElPulsoGlobal, especializada en asuntos globales y política internacional.