Glendale termina contrato con ICE y ya no detendrá a inmigrantes

En un contexto de creciente tensión por las redadas de inmigración en el área de Los Ángeles, la ciudad de Glendale anunció el domingo por la noche que ha puesto fin a su acuerdo con el gobierno federal para albergar a los detenidos capturados por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE). Esta decisión refleja los valores fundamentales de la ciudad, tales como la seguridad pública, la transparencia y la confianza comunitaria.

Contexto de la decisión

La terminación del contrato se produce en medio de la implementación de la ley SB 54, conocida como la Ley de Valores de California, que prohíbe a los municipios locales y estatales utilizar fondos para fines de cumplimiento de la inmigración federal, incluyendo el uso de instalaciones carcelarias. Esta ley convirtió a California en el primer estado santuario del país.

A pesar de la aprobación de esta ley, Glendale había continuado con su contrato con ICE, que databa de 2007. La antigua administración de la ciudad, bajo el liderazgo del jefe de policía Robert Castro, se había opuesto a la ley y decidió mantener el contrato, lo que generó críticas y descontento en la comunidad.

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Reacciones a la terminación del contrato

Tras el anuncio, la ciudad de Glendale expresó que, aunque el acuerdo se mantenía en conformidad con la legislación estatal, la percepción pública sobre el contrato había generado divisiones. "A pesar de la transparencia y las salvaguardias que la ciudad ha mantenido, reconocemos que la percepción pública del contrato con ICE se ha vuelto divisiva", declaró la alcaldía en un comunicado.

Sarah Houston, abogada de inmigración, había planteado preocupaciones durante una reunión del consejo municipal, subrayando las condiciones inhumanas que enfrentaban algunos detenidos. Según Houston, su cliente había estado sin comida durante nueve horas antes de ser trasladado a varias instalaciones. Ella enfatizó la importancia de que las comunidades locales se unan para proteger los derechos de los inmigrantes.

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Impacto en la comunidad

Desde enero, Glendale ha detenido al menos a 82 individuos para ICE, lo que ha llevado a Andrés Kwon, un abogado de la Unión Americana de Libertades Civiles del Sur de California, a afirmar que "con una población que es más del 50% inmigrante, la ciudad de Glendale debería ser un faro para los derechos de los inmigrantes".

La decisión de finalizar el contrato ha sido recibida con alivio por muchos en la comunidad, quienes ven en ella un paso hacia la defensa de los derechos humanos y la dignidad de los inmigrantes. Sin embargo, también se han expresado preocupaciones sobre cómo esto afectará a las familias que intentan visitar a sus seres queridos detenidos.

Conclusión

El anuncio de Glendale de terminar su contrato con ICE marca un cambio significativo en la política local hacia la inmigración, alineándose con la legislación estatal que busca proteger los derechos de los inmigrantes. Aunque esta decisión puede complicar el acceso a los detenidos para algunas familias, también representa un esfuerzo para fortalecer la confianza entre la comunidad y las autoridades locales. Este evento es un reflejo de la creciente resistencia en varias partes de Estados Unidos contra las políticas de inmigración federal, y ofrece un ejemplo de cómo los municipios pueden responder a la presión de sus comunidades.

Fuentes

Sobre la autora

Martina Torres es una reportera sénior de noticias internacionales para ElPulsoGlobal, especializada en asuntos globales y política internacional. Su trabajo se centra en temas de derechos humanos y justicia social, con un enfoque particular en las políticas de inmigración y su impacto en las comunidades.