Al menos 100 personas muertas a manos de hombres armados en el norte-centro de Nigeria, según grupo de derechos humanos.

Al menos 100 personas muertas a manos de hombres armados en el norte-centro de Nigeria

Un reciente ataque armado en el estado de Benue, en el norte-centro de Nigeria, ha dejado un saldo trágico de al menos 100 muertos, según ha informado Amnesty International Nigeria. Este suceso, que tuvo lugar entre la noche del viernes y las primeras horas del sábado en la comunidad de Yelewata, ha puesto de relieve la creciente violencia en la región y la grave situación de derechos humanos.

Hyacinth Alia Benue State governor professional image

Detalles del ataque

El ataque fue confirmado por la policía local, aunque no se precisó el número de víctimas. Sin embargo, el informe de Amnesty International señala que además de los muertos, decenas de personas están desaparecidas y cientos han resultado heridas, muchas de ellas sin acceso a atención médica adecuada. Según las denuncias, algunas familias fueron atrapadas y quemadas dentro de sus hogares, lo que ha generado un clima de terror en la comunidad.

Las imágenes y videos que circulan en las redes sociales muestran cuerpos sin vida y viviendas destruidas, evidenciando la brutalidad del ataque. Este tipo de violencia no es aislado; en el pasado, han ocurrido episodios similares en la región, donde los enfrentamientos entre agricultores y pastores por el acceso a la tierra y agua son frecuentes.

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Causas del conflicto

El conflicto en el norte de Nigeria a menudo se origina en disputas entre agricultores, que en su mayoría son de origen étnico diverso, y pastores, predominantemente de la etnia Fulani. Los agricultores acusan a los pastores de permitir que sus ganado pasten en sus cultivos, lo que destruye sus cosechas. Por otro lado, los pastores defienden que estas rutas de pastoreo están protegidas por leyes que datan de 1965, una situación que ha empeorado desde la independencia del país.

Este ataque se suma a una serie de incidentes violentos: el mes pasado, al menos 20 personas fueron asesinadas en un ataque similar en el área de Gwer West, y en abril, 40 personas murieron en el estado vecino de Plateau. Estas cifras evidencian un patrón de violencia que ha comenzado a tener repercusiones más amplias en la estabilidad regional.

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Reacciones y apoyo a las víctimas

El gobernador del estado de Benue, Hyacinth Alia, ha enviado una delegación a Yelewata para brindar apoyo a los familiares de las víctimas. La comunidad y el gobierno local enfrentan ahora el desafío de reconstruir no solo las infraestructuras destruidas, sino también la confianza y la cohesión social necesaria para prevenir futuros ataques.

Conclusión

La violencia en el norte-centro de Nigeria es un recordatorio de las complejidades que enfrenta el país en términos de seguridad y derechos humanos. La comunidad internacional y las organizaciones de derechos humanos deben seguir presionando al gobierno nigeriano para que tome medidas efectivas que aborden las causas profundas de este conflicto. Al mismo tiempo, es crucial que se brinde atención adecuada a los sobrevivientes y a las familias de las víctimas, que sufren las consecuencias de una violencia que parece no tener fin.

Fuentes

Bloomberg [1]
AP News [2]
Al Jazeera [3]
Sky News [4]
SABC News [5]
Times of India [6]
ABC News [7]
PBS [8]

Sobre la autora

Martina Torres es una reportera sénior de noticias internacionales para ElPulsoGlobal, especializada en asuntos globales y política internacional. Con años de experiencia en el periodismo, se enfoca en cuestiones de derechos humanos y conflictos internacionales, llevando la voz de los afectados a la primera línea de la información.

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