Introducción
El reciente anuncio del gobierno húngaro, encabezado por el Primer Ministro Viktor Orbán, de retirarse del Tribunal Penal Internacional (CPI) ha generado un fuerte impacto en la comunidad internacional y en los mercados europeos. Esta decisión, comunicada formalmente a las Naciones Unidas el 2 de junio de 2025, ha sido interpretada como un desafío a la justicia global y a la protección de los derechos humanos, especialmente en el contexto de los crímenes de guerra en Gaza.

Contexto de la Decisión
La decisión de Hungría de abandonar el Estatuto de Roma, el tratado fundacional del CPI, se produce tras la visita del Primer Ministro israelí, Benjamin Netanyahu, a Budapest el 3 de abril. Durante esta visita, Hungría decidió no arrestar a Netanyahu, quien es buscado por el CPI por presuntos crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad cometidos en Gaza, lo que ha suscitado críticas de organizaciones como Human Rights Watch.

Consecuencias de la Retirada
La retirada de Hungría del CPI tendrá efectos significativos tanto para el país como para el resto de la Unión Europea. Según las leyes del CPI, los países miembros tienen la obligación de arrestar y entregar a cualquier persona buscada por el tribunal que se encuentre en su territorio. La falta de cooperación de Hungría podría ser objeto de una determinación legal por parte de los jueces del CPI, lo que podría llevar a la Asamblea de Estados Parte del CPI a tomar acciones adicionales.

Impacto en Europa y en los Mercados
La postura de Hungría representa un desafío a los principios de justicia internacional, que son fundamentales para la estabilidad política y económica en Europa. La Unión Europea ha sido un firme defensor del CPI y la retirada de Hungría podría afectar las relaciones diplomáticas y comerciales dentro del bloque. Además, esta situación podría influir en la percepción de los inversores sobre la seguridad jurídica en la región.
Reacciones desde la Unión Europea
Los países miembros de la UE han expresado su preocupación por la decisión de Hungría. Se espera que la Comisión Europea y otros miembros del CPI presionen a Hungría para que reconsidere su retirada y reafirme su compromiso con la justicia internacional. La UE ha establecido que la ratificación del Estatuto de Roma es un requisito para que nuevos estados se unan al bloque, lo que pone en entredicho la posición de Hungría como miembro de la Unión.
Conclusión
La decisión de Hungría de retirarse del CPI no solo es un retroceso para la justicia internacional, sino que también plantea serias interrogantes sobre el futuro de la cooperación judicial en Europa. Con el contexto actual de tensiones geopolíticas y violaciones de derechos humanos, es crucial que los estados miembros de la UE trabajen conjuntamente para asegurar que se mantenga el principio de justicia y rendición de cuentas.
Fuentes
- Human Rights Watch. "Hungary: Orbán Government Withdraws from ICC." [1]
- Comunicado de la ONU sobre la notificación de Hungría. [2]
- Información sobre crímenes de guerra en Gaza. [3]
Sobre la autora
Martina Torres es una reportera sénior de noticias internacionales para ElPulsoGlobal, especializada en asuntos globales y política internacional. Con varios años de experiencia en el periodismo, su enfoque se centra en la intersección entre derechos humanos, justicia y política en el contexto europeo y global.