La Copa Mundial de la FIFA se dirige a la EE. UU. de Trump. ¿Querrá el mundo venir —o incluso podrá hacerlo?
La Copa Mundial de la FIFA 2026, uno de los eventos deportivos más esperados a nivel internacional, se llevará a cabo en Estados Unidos, México y Canadá. Sin embargo, el contexto político en EE. UU., bajo la administración del presidente Donald Trump, ha suscitado preocupaciones en torno a la capacidad y disposición de los aficionados internacionales para asistir al torneo.

Preocupaciones sobre derechos humanos y política migratoria
Grupos de derechos humanos, como Human Rights Watch, han expresado "graves preocupaciones" respecto a cómo las políticas migratorias de EE. UU. podrían afectar la asistencia de aficionados al Mundial. Desde la llegada de Trump al poder, se ha intensificado el control fronterizo y se han implementado nuevas restricciones de visado, creando un ambiente de temor entre los potenciales visitantes [1].
El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, un aliado de Trump, ha declarado que los aficionados internacionales serán bienvenidos en el torneo. Sin embargo, la postura de Trump sobre inmigración plantea interrogantes sobre los desafíos que enfrentarán muchos de los aficionados que planean viajar a EE. UU. para el evento [2].

Impacto en los mercados españoles y europeos
Para los aficionados españoles y europeos, la posibilidad de asistir al Mundial se ve afectada por el clima político actual en EE. UU. La percepción de un ambiente hostil puede disuadir a muchos de viajar, especialmente a aquellos que provienen de naciones con tensiones políticas con Estados Unidos. Expertos en marketing deportivo han señalado que es plausible que algunos aficionados opten por no asistir por miedo a ser detenidos [3].
Por ejemplo, Irán, que ya ha calificado para el torneo, se encuentra en medio de un conflicto diplomático con EE. UU., lo que complica aún más la situación para sus aficionados. Aunque existen excepciones para atletas y entrenadores, no hay garantías para los aficionados que deseen asistir al evento [4].

Perspectivas futuras
A medida que se acerca la Copa Mundial, la situación política de EE. UU. podría convertirse en un obstáculo significativo para la asistencia internacional. Con otros eventos deportivos importantes programados, como el Club Mundial de la FIFA y la Copa Ryder, la pregunta persiste: ¿querrá el mundo venir, o incluso podrá hacerlo? [5].
Conclusión
La Copa Mundial de la FIFA 2026 representa una oportunidad única para EE. UU., pero también plantea retos considerables debido al entorno político y a las preocupaciones sobre derechos humanos. La respuesta de los aficionados internacionales, especialmente de aquellos provenientes de España y Europa, dependerá en gran medida de cómo se desarrolle la situación en los meses previos al torneo. La comunidad internacional estará atenta a cómo la FIFA y el gobierno estadounidense manejan estas preocupaciones.
Fuentes
- [1] The FIFA World Cup is heading to Trump's U.S. Will the world want to ...
- [2] The FIFA World Cup is heading to Trump's U.S. Will the world want to ...
- [3] Trump travel ban sparks World Cup questions — and raises more soccer ...
- [4] The Trump Administration's Influence on the 2026 FIFA World Cup
- [5] Effect of Trump's diplomatic policies on 2026 World Cup unclear
Sobre la autora
El autor de este artículo es Martina Torres, una reportera sénior de noticias internacionales para ElPulsoGlobal especializada en asuntos globales y política internacional.
Fuentes
- The FIFA World Cup is heading to Trump's U.S. Will the world want to ...
- The FIFA World Cup is heading to Trump's U.S. Will the world want to ...
- Trump travel ban sparks World Cup questions — and raises more soccer ...
- The Trump Administration's Influence on the 2026 FIFA World Cup
- Effect of Trump's diplomatic policies on 2026 World Cup unclear